A cinco meses de estar detenida por el FBI, Emma Coronel, conocida mundialmente como la esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, reveló de su función en el negocio de su marido.
Este jueves se realizó una audiencia en la corte de Washington (Estados Unidos), en la que Coronel se declaró culpable de tres cargos, incluidos el de tráfico de drogas y lavado de dinero. El juez Rudolph Contreras explicó a la acusada que enfrenta una sentencia máxima de cadena perpetua bajo el cargo de conspiración de drogas, así como un mínimo de 10 años, aunque la sentencia final puede variar entre ambos rangos, informó el periodista Keegan Hamilton.
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“Está muy feliz de dejar esto atrás”, expresó su abogado Jeffrey Lichtman, a la salida del tribunal. La sentencia se hará pública en septiembre. Sin embargo, el haberse declarado culpable podría reducir su condena.
La exreina de belleza y madre de dos niñas mellizas que tuvo con El Chapo, está acusada de conspiración para distribuir en Estados Unidos un kilo o más de heroína, cinco kilos o más de cocaína, una tonelada o más de marihuana y 500 gramos o más de metanfetaminas. Además, es acusada de colaborar en dos complots para ayudar a Guzmán a escapar de prisiones mexicanas.
Joaquín fue durante años el jefe del Cártel de Sinaloa, uno de los grupos criminales más violentos y conocidos de México. Según las autoridades estadounidenses, se trataba del principal proveedor de drogas ilegales de Estados Unidos.
Actualmente, el exjefe del cártel está recluido en una prisión de máxima seguridad en Colorado y cumple cadena perpetua.
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