El pasado sábado 18 de noviembre se celebró la edición 72ª del Miss Universo en El Salvador, un evento que reunió a las mujeres más bellas del mundo y que dejó varias sorpresas y curiosidades. Una de ellas fue la decisión de Miss Pakistán, Erica Robin, de usar un burkini en lugar de un traje de baño, como lo hacen el resto de las candidatas.
Un burkini es una prenda que cubre todo el cuerpo, excepto la cara, las manos y los pies, y que está diseñada para que las mujeres musulmanas puedan bañarse en público sin violar las normas de su religión. Erica, de 25 años, optó por usar un burkini de colores pasteles durante la competencia de traje de baño, tanto en la gala preliminar como en la final, haciendo historia en el Miss Universo, ya que es la primera vez que una participante se presenta con esta vestimenta.
La modelo, que debutó este año como la primera representante de Pakistán en el certamen de belleza, explicó que su decisión fue una forma de respetar sus creencias culturales y religiosas, y también de enviar un mensaje de inclusión y diversidad. Sin embargo, su participación no fue bien vista por su propio país, que la rechazó y la desautorizó.
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Según declaraciones de autoridades gubernamentales y religiosas de Pakistán, Robin no tenía el permiso para representar al país islámico en el Miss Universo, y menos para lucir su piel más allá de lo permitido. Afirmaron que para concursar en nombre de Pakistán, debían tener su visto bueno, el cual no fue otorgado. Además, la opinión pública en Pakistán también se mostró en contra de la modelo, criticando su actitud y su apariencia.
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A pesar de la presión social y el desprecio de su país, Erica Robin se mantuvo firme en su propósito y logró llegar al Top 20 del Miss Universo, siendo una de las favoritas del público y de la prensa. La joven, que trabaja como modelo desde el 2020, expresó su orgullo por haber representado a Pakistán y por haber roto las reglas del concurso de belleza más importante del mundo.
