Una masacre en una escuela de Uvalde, Texas ha conmovido al mundo entero. Un hombre de 18 años identificado como Salvador Ramos fue el autor del asesinato de al menos 19 niños y dos profesores. Ramos fue abatido poco después por agentes policiales.
Según detallaron varios medios, el joven antes de irrumpir a la Escuela Primaria Robb, le propinó 8 disparos a su abuela, quien se encuentra luchando por su vida en un centro médico.
El atacante era estudiante del último año de secundaria, sufría de bullying desde su infancia por tener problemas de habla y tartamudear.
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A raíz de las burlas en su contra, Salvador Ramos creció siendo una persona violenta y a menudo tenía actitudes que a su círculo social le parecían extrañas. Sumado a esto, tenía una mala relación con su madre.
Al parecer el joven trabajaba en un restaurante de comida rápida de la localidad, cinco días a la semana. El gerente del local describió al muchacho como «un tipo tranquilo, que no dice mucho. No socializaba con los otros empleados».
El senador del Estado de Texas reveló que el joven compró legalmente dos rifles de asalto y decenas de municiones para su cumpleaños número 18. Sin embargo, el culpable de la tragedia no tenía antecedentes penales.
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