Tras la desaparición del sumergible Titán cuando intentaba llegar a los restos del Titanic el 18 de junio de 2023, se ha recordado las 33 expediciones en las que el director James Cameron bajó a visitar el trasatlántico que se hundió en el océano el 15 de abril de 1912.
En 1995 el famoso bajó por primera vez a explorar los restos del Titanic. En sus exploraciones, entre la década de los 90 y principios de los 2000, llegó a una profundidad de 3.821 metros en un submarino ruso, Mir, que ahora está fuera de servicio.
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Aunque Cameron no se ha pronunciado públicamente sobre la actual búsqueda del submarino OceanGate que exploraba el naufragio del Titanic con cinco personas a bordo, Cameron escribió un libro junto a Parks Stephenson, director técnico de la película de 1997, en el que relataron su experiencia de la exploración.
“La idea es que, si puedes ir al lugar más profundo del océano, puedes ir a cualquier parte del océano. Hay tantos de estos lugares extremadamente profundos que, juntos, forman la última frontera inexplorada de nuestro planeta. Había vida allí abajo, pero la impresión general cuando llegas allí es que esto es tan estéril y yermo como la luna. Y nunca me sentí más apartado del mundo”, expresó James a NPR.
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Sin embargo, casi pierde la vida en uno de esos viajes. Aseguró que viajaba en un sumergible acuático, una pequeña embarcación diseñada para operar a mucha profundad, pero alrededor de los 7.900 metros de profundidad empezó a sospechar que le pasaba algo.
“Fue un poco espeluznante porque perdí mi altímetro, perdí mi profundímetro de buceo, perdí el control del sistema de iluminación, perdí el control del propulsor y más cosas. Dudé de si debía seguir adelante y, en determinado momento, terminé soltando lastre porque no sabía dónde estaba el fondo, no tenía forma de averiguarlo y no quería chocarme”, contó Cameron.
