La música regional mexicana está en riesgo en Tijuana, Baja California, debido a las amenazas de muerte que han recibido algunos de sus exponentes por parte de un grupo delictivo. La agrupación Fuerza Regida, que recientemente colaboró con Shakira en la canción El Jefe, fue una de las víctimas de esta intimidación que los obligó a cancelar su concierto en esa ciudad.
Fuerza Regida tenía previsto presentarse el día 6 de octubre en Tijuana, pero una narcomanta colgada en un puente les advirtió que no lo hicieran si no querían sufrir las consecuencias. La narcomanta estaba firmada por el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), una de las organizaciones criminales más poderosas y violentas de México.
El motivo de esta amenaza sería el estilo musical del grupo, conocido como corridos tumbados, que narra historias de narcotráfico, violencia y drogas. Este género ha sido censurado y prohibido en algunas ciudades del país por considerarse una apología del delito.
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Ante esta situación, la banda decidió no arriesgar su integridad y anunció en sus redes sociales la cancelación del evento “por razones fuera de nuestro alcance”. Los fans expresaron su apoyo y comprensión a la agrupación, que ha logrado gran éxito con temas como ‘Sigo Chambeando’, ‘En Modesto Se le Pasa’ y ‘Llena de Polvo’.
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No es la primera vez que un artista de música regional mexicana recibe amenazas de muerte en Tijuana. Hace varias semanas, el cantante Peso Pluma también fue intimidado por el CJNG con unas narcomantas que le impedían presentarse en esa ciudad. Peso Pluma es conocido por sus canciones que hacen referencia a los carteles y los narcotraficantes, especialmente a Joaquín Guzmán Loera (El Chapo) y sus hijos.
