El Canal de Panamá reconoció que 134 buques se encuentran en espera para cruzar la vía, que aplica desde julio varias restricciones al tránsito por la sequía que experimenta el país.
En consecuencia, el canal utiliza un sistema de esclusas que elevan los barcos al nivel del lago Gatún del que proviene el agua y navegan por el cauce de esta infraestructura que comunica los océanos Pacífico y Atlántico. Cada año utilizan el pasaje entre 13.000 y 14.000 embarcaciones.
Ante ello, el Canal de Panamá ha limitado temporalmente el número de nuevos espacios de pasaje reservados para ayudar a aliviar un cuello de botella de barcos que esperan transitar sin reserva.
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Cabe recodar que, las autoridades de ese país anunciaron hace unos días la entrada en vigor de nuevas restricciones al tránsito de buques. De esta forma, se ha reducido el número de permisos diarios de 16 naves al día a 14. El motivo principal es que esta gigantesca infraestructura requiere de una gran cantidad de agua para operar, unos 193 millones de litros para cada uno de los cerca de 12.000 tránsitos anuales que se producen.
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Por lo tanto, esta decisión ha provocado un atasco de embarcaciones comerciales que buscan pasar por el canal, uno de los pasajes más concurridos del mundo. Las empresas que normalmente usan la vía fluvial ahora buscan rutas alternativas.
