La madre de Meghan Markle, Doria Ragland no escatimó para cruzar el charco de los Ángeles a Londres, mientras se acerca el esperado parto de su nieto real.
Recordemos que en el mes de octubre, el palacio de Kensington compartió que la madre de la duquesa de Sussex «Está muy feliz» y “espera con ansias darle la bienvenida a su primer nieto”.
Hay que destacar que la fecha de nacimiento del bebé de la duquesa de Sussex sigue siendo un misterio.
Cuando el palacio dio a conocer la noticia de la espera de Meghan solo revelaron que el nacimiento se esperaba para la «Primavera de 2019».
Además, la ex estrella de Suits soltó la lengua durante el mes de enero, cuando dio a conocer que tenía unos aproximados seis meses, lo cual generó en la presa la especulación que la mujer diera a luz a finales de abril o principios de mayo.
Meghan y el príncipe Harry continuaron con el hermetismo alrededor de la llegada de su primer bebé.
Y es que en definitiva ellos han rotos todos los protocolos, e inclusive han preferido mantener todos los detalles en privado.
Los informantes del palacio de Kensington aseguran que los duques de Sussex no revelarán ninguna información, hasta que ellos mismos hayan tenido la oportunidad de disfrutar el momento como su familia.
Cabe destacar, que al contrario de los nacimientos más importantes dentro de la familia real, todo parece indicar que Markle no dará a luz en el famoso hospital St.Mary y más bien podría optar por un lugar más cercano a su nuevo hogar, en el Frogmore Cottage de los terrenos de Windsor.
Este domingo de pascua, Meghan estuvo ausente del servicio religioso en donde se reunió a la familia real, así que es fácil imaginar que ahora solo es cuestión de tiempo para la llegada del bebé.
