Hablar de la comida típica mexicana es tocar el corazón y alma de una nación forjada por la herencia de sus antepasados. Es un campo en el que se respira el pasado, el presente y el futuro de su gente; sus tradiciones, y sus recetas. Por esta razón, la gastronomía mexicana ha logrado traspasar el tiempo y mantenerse como un pilar culinario mundial.
Pozole:
Fue preparado por primera vez durante la época prehispánica, y con el paso del tiempo se consolidó como un emblema de la cocina gracias a su exquisito sabor. Sus ingredientes principales son el caldillo, que se acompaña de maíz, carne y verduras. Hoy en día, no hay lugar mexicano en el que el pozole no tenga cabida.
Chiles en nogada :
Si de platillos mexicanos hablamos, el chile en nogada es un homenaje a México desde su misma presentación. Se originó en Puebla y consiste en un chile poblano capeado, relleno de picadillo de cerdo con frutas secas y bañado en salsa de crema. Cuando se sirve, alude a la bandera mexicana con sus colores.
Tamales :
Acompañado de un humeante atole por la mañana o de un café de olla durante la noche, el tamal es un platillo para toda ocasión. Esta especie de masa cocida rellena de carne, salsa, verduras y otros ingredientes, nació en la época prehispánica y con el paso del tiempo se ha convertido en un emblema de esta cocina.
Finalmente estos son algunos de los muchos platos típicos mexicanos , lo cierto es que todos pueden representar perfectamente el corazón y paladar de sus habitantes en el mundo.