El influyente rapero y productor musical, Sean “Diddy” Combs, continúa negando las acusaciones en su contra, pero los testimonios de víctimas e implicados en su supuesta red de tráfico sexual siguen emergiendo. Las recientes demandas describen eventos brutales que tenían lugar en excéntricas fiestas organizadas por el músico en hoteles de lujo en Miami, Atlanta, Nueva York, Las Vegas y Los Ángeles.
En esta oportunidad, según informes del Miami Herald, estas reuniones, conocidas como “Freak-Offs” o “FOs”, tenían como objetivo satisfacer el aparente apetito hedonista de Combs. No solo participaba en los actos, sino que también dirigía y filmaba personalmente a los asistentes, ajustando la iluminación y los decorados para capturar con mayor “estética” a las mujeres y hombres que ofrecían servicios sexuales.
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Val destacar que, uno de los testimonios más impactantes proviene de Casandra “Cassie” Ventura, una joven aspirante a cantante de R&B a quien Combs ayudó a través de su compañía discográfica Bad Boys Records.
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Sin embargo, Ventura afirma que posteriormente fue manipulada y sometida a años de ejercicio físico forzado y servidumbre sexual. Según su relato, Sean “Diddy” Combs se alcoholizaba y agredía físicamente a los presentes, incluso a menores de edad. En una ocasión, tomó a una mujer de la suite y la colgó sobre el balcón del piso.
Cabe recordar que, a pesar de estos testimonios crudos, Ventura llegó a un acuerdo solo un día después de brindar su declaración. El abogado de Combs sostiene que este arreglo no implica aceptación de ningún cargo. La situación sigue siendo tensa mientras las investigaciones continúan y las víctimas buscan justicia.
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