Las duquesas Kate Middleton y Meghan Markle protagonizaron un duelo de estilos en la final femenina de Wimbledon.
Esta fue la primera ocasión en que las esposas del los príncipes William y Harry aparecen en público juntas y solas, es decir, sin sus esposos.
Meghan Markle optó por una camisa de manga larga de Ralph Lauren, que combinó con un pantalón blanco de cintura alta, una imagen que para algunos era muy informal, «muy estadounidense», para un miembro de la realeza británica.
Meghan, además, lució su cabello en un “moño relajado»,estilismo que según los expertos estaba fuera de protocolo.
Kate Middleton, por su parte, eligió para la ocasión un vestido blanco con estampado de pelotas de tenis y lazo en el hombro de Jenny Packham, una de sus firmas preferidas, un estilo más formal que tampoco agradó a todos.
Varios reporteros criticaron a la esposa del príncipe William por seguir exhibiendo un estilo anticuado, de «matrona».
Y ¿a quién prefirió la gente? Pues el estilo “informal” de Meghan conquistó a la mayor parte del público, según los sondeos de varios diarios del Reino Unido, que la destacan como más moderna que la duquesa de Cambridge.
Cabe destacar, que Meghan Markle mantiene desde hace bastante tiempo una amistad cercana con la tenista Serena Williams, quien estuvo presente en su boda con Harry de Gales. Wiliams perdió el campeonato ante la alemana Angelique Kerber.
La duquesa de Cambridge, quien está aún de baja por maternidad, es una fiel aficionada al llamado deporte blanco. De hecho, cada año suele asistir con su esposo al evento.
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