Finalizada la gira los duques de Sussex por Nigeria, el rey Carlos III apareció con su hijo mayor, el príncipe Guillermo, en el que es su primer acto público desde que le diagnosticaron cáncer. Todo un golpe de efecto con el que el soberano ha querido apuntalar su reinado y mostrar su fortaleza.
El jefe del Estado nombró al heredero al trono, coronel en jefe del Cuerpo Aéreo del Ejército, todo un espaldarazo y una muestra más de confianza hacia el príncipe de Gales. Este gesto, además, se interpretó como un desaire al príncipe Harry quien sirvió en este regimiento hace una década.
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La cita entre el príncipe y el rey tuvo lugar en el Centro de Aviación del Ejército en Middle Wallop, en Hampshire. El rey Carlos III escenificó el traspaso entregando al príncipe de Gales la característica boina azul celeste de este Cuerpo ante un helicóptero militar.
Además, el rey Carlos descubrió una placa que conmemora la llegada del primer Apache AH Mk.1 que se instalará en un museo después de haber sido recibido por una guardia de honor. Después, el príncipe Guillermo se vistió de militar y ejerció por primera vez su nuevo rol.
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Detalles del estado de salud del rey
Durante el recorrido, el monarca compartió detalles de su enfermedad con un veterano del ejército británico. El rey Carlos III comentó que el año pasado tuvo cáncer testicular y se sometió a unos ciclos de quimioterapia que le hizo perder el sentido del gusto.
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