Este 15 de marzo, el rey Felipe VI informó a través de un comunicado oficial que renuncia a la herencia que pueda corresponderle del rey emérito Juan Carlos.
En el mismo, dejó claro que le retira a su propio padre la paga que tiene asignada de la corona.
Presuntamente, la decisión deriva de una investigación ya iniciada en España en torno a la fortuna del rey emérito Don Juan Carlos.
Específicamente, el comunicado indica que renuncia a: “cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la lealtad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada y que deben informar la actividad de la Corona”.
La cadena BBC dio a conocer que en la prensa suiza trascendieron detalles de una supuesta transacción financiera irregular, es decir, las averiguaciones actuales están centradas en la relación del pago entre la familia real de Arabia Saudí y Juan Carlos I.
