Los gatos y los humanos han compartido desde hace miles de años. De hecho, en el Antiguo Egipcio, estos animales eran adorados como dioses y se enterraban momificados junto con sus cuidadores. Aunque son seres amorosos e inofensivos, también pueden llegar a transmitir diferentes enfermedades a las personas, algunas de ellas muy graves, razón por la cual es importante tener algunos cuidados.
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Los mininos, así como los demás animales domésticos, pueden ser portadores de parásitos, hongos, bacterias y virus. Estos pueden transmitirse hacia las personas cuando entran en contacto con sus heces, saliva, orina o pelo.
Para evitar las enfermedades causadas por gatos u otros animales domésticos, los veterinarios recomiendan hacer chequeos médicos de forma regular, así como cumplir y mantener al día la desparasitación y la vacunación. Además, aconsejan limpiar la caja de arena del gato con cuidado y lavarse muy bien las manos luego de manipularla.
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Estas son las principales enfermedades que pueden ser transmitidas por los gatos:
La toxoplasmosis es una de las enfermedades más temidas por las mujeres en estado de gestación. Se trata de una infección que, normalmente, causa síntomas mínimos o que, incluso, puede permanecer sin ser detectada. Sin embargo, en personas con un sistema inmune comprometido o mujeres en embarazo, esta enfermedad puede traer grandes riesgos.
La toxocariasis es una infección provocada por el parásito Toxocara cati, una lombriz que se aloja en el intestino del animal. Entre otras enfermedades que pueden trasmitir los gatos.
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