EFE. Eiza González es una de las actrices del momento. Desde que se diera a conocer en Hollywood con Baby Driver hace año y medio, la mexicana ha encadenado hasta 11 proyectos, desde superproducciones como Godzilla vs. Kong, hasta la emocionante Welcome to Marwen, de estreno mañana.
«Estoy muy orgullosa y muy feliz», dijo la artista en una entrevista con Efe. «Ha sido un gran año de mucho trabajo y aprendizaje, pero lo que me está ocurriendo es algo extremo.
Es increíble, pero te deja exhausto. Lleva mucho sacrificio y cansancio», agregó.
Tras Baby Driver, la cinta de acción de Edgar Wright, ha participado en rodajes como Paradise Hills (de la española Alice Waddington, que se verá en Sundance), Alita: Battle Angel (en salas en febrero) o Hobbs and Shaw (la primera obra escindida de la saga Fast and Furious), que acaba de concluir en Londres junto a Dwayne Johnson y Jason Statham.
«No he parado de viajar alrededor del mundo y es algo que agradezco mucho. Son proyectos de los que nunca pensé que podría formar parte. No sé si es bueno o malo, pero siempre pienso que esta racha se va a acabar, así que trato de aprovecharla al máximo», declaró.