Harvey Weinstein tomó la decisión de entregarse ante el Departamento de Policía de Nueva York, luego de las diversas acusaciones por abusos y acosos sexuales que recaen en su contra desde el pasado año, cuando varias actrices y modelos se encargaron de compartir sus traumáticas experiencias mientras trabajaban junto al estadounidense.
Aunque decidió ponerse a la orden de la justicia y a pesar de las más de 70 denuncias en su contra, su defensor legal, Benjamin Braffman, comentó que su cliente planea declararse inocente de los tres cargos que se le imputan por violación de tercer grado, violación de primer grado y cargo de acto sexual criminal en primer grado.
“El señor Weinstein se declarará inocente. Tenemos la intención de movernos muy rápidamente para desestimar estos cargos”, aseguró el abogado.
Durante su primer encuentro con el juez se fijó en primera instancia una fianza de 10 millones de dólares.
Además de esto, los agentes policiales le colocaron un dispositivo de rastreo por GPS, para así mantener a Harvey Weinstein vigilado durante todo el proceso judicial y saber su paradero permanentemente.
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Al finalizar esta primera reunión, Harvey Weinstein abandonó la fiscalía esposado y con una peculiar sonrisa que dejó impactada a toda la prensa que se encontraba apostada en las inmediaciones del recinto.
Una de las acusaciones que más impacto causó en contra de Harvey Weinstein, fue la que realizó Salma Hayek quien aseguró que el productor la amenazó de muerte. En entrevista con Oprah Winfrey la protagonista del filme “Duro de cuidar”, confesó que todo lo que vivió con Weinstein durante el rodaje de la película “Frida” la condujo a la depresión.
