Kourtney y Kim Kardashian siempre han sido conocidas por las fuertes peleas que han protagonizado en el pasado, tanto en Keeping up with the Kardashians, como en su nueva versión The Kardashians. Sin embargo, su última confrontación parece ser más seria ya que Kourtney cree que Kim no tiene respeto por su relación y mucho menos lealtad.
El conflicto surgió después de que Kim colaborara con Dolce & Gabbana poco después de que Kourtney se casara y su boda fuera “vestida” por la misma casa de alta costura. Kourtney se sintió traicionada por su hermana y aseguró que se aprovechó de su boda para tener una oportunidad de negocios, sin mencionar que le copió la esencia de su boda.
La boda de Kourtney Kardashian y Travis Barker fue el evento más importante de las Kardashians en el 2022, y fue planificada en su totalidad por Domenico Dolce y Stefano Gabbana. La firma se encargó del vestido de novia de Kourtney y de los outfits estilo barroco del resto de la familia.
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Khloe Kardashian intentó explicarle la situación a Kim, pero la empeoró al decir que había escuchado que sus amigos estaban apoyando a Kourtney. Ante esto, Kim respondió entre molesta y burlona.
El problema sigue en aumento ya que Kourtney asegura que su hermana no se veía feliz en su boda. Todos estaban pasándolo de maravilla, pero ella nunca puede reconocer nada, y ni siquiera lo ve, lo que vio fueron signos de dólares. Para Kourtney, está muy claro que «estuviste ahí y no estabas feliz».
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Esta pelea entre las hermanas Kardashian es una muestra más de las tensiones que existen en esta familia famosa y muestra que los negocios y la competencia pueden poner en peligro incluso las relaciones familiares más cercanas.
