Bailarín de Sixto Rein es detenido por presunta violación a una menor de edad

Alejandro Arratia - Cortesía
Alejandro Arratia - Cortesía

El bailarín venezolano Alejandro Arratia, mejor conocido como «Ale The Wolf», fue detenido en horas de la madrugada del martes 3 de enero de 2023, luego de que violara en complicidad de otro hombre a una adolescente de 17 años.

Familiares de la víctima denunciaron el aberrador momento ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), después de que la joven fue hallada drogada, con rastros de sangre y desorientada en una calle cercana al lugar de los hechos.

«Al cabo de unas dos horas, la joven apareció ensangrentada en una calle aledaña, había salido de una casa donde fue bañada. Ella estaba inconsciente», denunciaron sus familiares.

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Al parecer la violación ocurrió el pasado 1 de enero en el barrio El Amparo de Catia, al oeste de Caracas. Según declaraciones de sus allegados, la joven se dirigió a casa de los suegros de su hermano mayor para recibir el año nuevo.

También se dio a conocer que a la menor de edad se le realizaron unos exámenes forenses, los cuales confirmaron que la «muchachita» fue victima de abuso sexual, además de tener rastros de droga en su organismo.

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El otro hombre, quien se encuentra prófugo de la justicia, se llama Keyber Vargas. «Mi hijo estudió con Keiver Vargas quien se encuentra prófugo de la justicia. Estudiaron juntos en el liceo, pero nunca pensó que esto pasaría. En medio de la reunión, mi hija desapareció y cuando empezaron a buscarla, uno de los presentes dijo que ella se había ido con Keiver y otro chico. Empezaron a buscarla por toda la zona, pero no la encontraron», expresó la madre de la víctima.

«La drogaron con una pastilla azul, una especie de analgésico. Se la metieron a juro en la boca, se la llevaron de la casa sin que los demás se dieran cuenta, y abusaron de ella en el carro de Keiver. Luego de hacerle eso, ambos discutieron porque uno le eyaculó adentro, por eso fueron a una farmacia y le compraron una Postinor (pastilla del día siguiente). Después la llevaron a la casa de Keiver, la bañaron y la dejaron a su suerte. Ella no podía caminar bien y alguien de la misma zona la llevó a la casa de los suegros de su hermano, de dónde la sacaron horas antes», concluyó la mamá.

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