Tatuador Johan Castillo - Cortesía
Tatuador Johan Castillo - Cortesía

Johan Castillo, un caraqueño de pura cepa, que desde pequeño fue apasionado del dibujo, pintar y diseñar siempre le interesó, tanto como su pasión por la esgrima, deporte al que dedicó mucho tiempo y esfuerzo.

Fue ese interés constante por las artes lo que llevó a Johan a estudiar diseño gráfico en la universidad y, es en ese proceso cuando descubre el mundo de la tinta.

Con no poco esfuerzo adquiere su primer kit de tatuajes y comienza así su búsqueda de un “tutor” que lo adiestre en el arte del tattoo. Una tarea que él mismo confiesa resultó muy compleja, ya que los tatuadores del momento no querían “revelar” sus técnicas, siendo en exceso celosos de sus conocimientos en el área.

Hablando del desarrollo de su talento, Johan comenta: “Mis metas cambian constantemente, cuando alcanzo una enseguida surge un nuevo objetivo a corto plazo, lo cual me lleva a un continuo crecimiento y eso se refleja en mi trabajo, siempre busco que cada tatuaje sea mejor que el anterior”.

¿Cuál dirías es el estilo que mejor dominas en el tatuaje?

Mi fuerte sería el realismo y surrealismo, son los estilos a los que le he dedicado más tiempo y empeño en desarrollar. Me gusta fusionarlo con otros estudios como el pop art, el cubismo, el futurismo, el arte del grafiti, el neotradicional y el tradi americano. La verdad, no me cierro a la idea de innovar, cuando al estilo se refiere, siempre estoy en la búsqueda de mi propio sello.

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¿Cuál ha sido el tatuaje más raro que te han pedido hasta el momento?

Esa es una pregunta que frecuentemente me hacen los clientes. Me han pasado cosas que se podría decir que son raras, una vez me tocó una clienta que quería que le hiciera una araña en su parte íntima completa. También me escribió un chico actor porno que quería tatuarse un aro de fuego en el ano… Si, creo que estás dos serían las más raras que me han pedido.

¿Hay algún trabajo que te haya parecido especialmente difícil?

Todos son difíciles, hasta los tatuajes más pequeños son muy difíciles ya que el margen de error es muy notable todos los tatuajes se debe de prestar atención hasta el más mínimo detalle. Siento que esto me caracteriza en mi trabajo ya que me importa cada detalle cada trazo me lo tomo muy apecho.

¿Dónde encuentras la inspiración para crear todo lo que haces como tatuador?

Podría sonar arrogante, pero trato de buscar inspiración en mí mismo, en las cosas que he pasado que he vivido, en lo que pienso, en lo que creo, esa es mi fuente de inspiración. Una vez el master Yomico Moreno me dio un consejo y fue que dejara de seguir a tatuadores, que dejara de ver tatuajes y de imitar estilos y me concentrará en lo que realmente me gusta y lo que quería hacer. También para ese entonces yo practicaba Wing Chun Kung Fu y mi sifu me dijo unas palabras que me aclararon mucho más las cosas aunque no se trataba directamente del tatuaje, pero siento que para todo es lo mismo: «Uno no puede ir por la vida haciendo de todo, sino nunca serás bueno en nada, tal vez podrías hacer de todo, pero tu taza estará tan llena que se derramará. Tienes que vaciar tu taza y llenarla, cuantas veces sea necesario vacía tu tasa amigo mío», esas fueron sus palabras y hoy en día las entiendo y por eso la fuente de mi inspiración no la busco en nadie si no en mí mismo.

¿Quién tatúa al tauador?

Me he tatuado con amigos, para coleccionar sus piezas, pero ahora mismo tengo mucho tiempo sin tatuarme. Realmente no estoy muy tatuando, me gustaría tatuarme más, pero frené un poco, pues sentía que iba a estar todo muy mal tatuado al ritmo que iba. Planeo hacerme algunos con mis amigos Roberto Carlos y Emersson Pabón.

¿Qué es lo más difícil de dedicarse al mundo del tatuaje?

Lo más difícil es que el tatuador sacrifica muchas cosas para lograr sus cometidos, como el tiempo con su familia. Un tatuador le dedica muchas horas a los clientes y al tatuaje, pero es necesario para poder alcanzar lo que se propone.

¿A qué te dedicarías hoy si no fueras tatuador?

Si no fuera sido tatuador, quizás estuviera en la selección de esgrima, sería deportista o maestro en Kung fu. En mi vida he dedicado mucho tiempo a muchas cosas, en mi opinión todos pueden lograr lo que se propongan con tal tengan las ganas y el enfoque de hacerlo, yo creo que no hay un talento, solo el esfuerzo y las ganas vencen a la pereza y es cuando uno logra brillar.

Parte de su arte.

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