Después de varios días de haber muerto el príncipe Felipe de Edimburgo, la reina Isabel II retomó su obligaciones reales el martes 13 de abril para para presidir la ceremonia de jubilación del antiguo Lord Chambelán, William Peel.
El Conde Peel renunció a sus funciones como ayudante de mayor rango de la familia real, puesto que ocupó durante 14 años. En consecuencia, el trabajador devolvió la vara y las insignias que le entregaron tiempo atrás. La ceremonia se llevó a cabo en el castillo de Windsor.
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Antes de renunciar a su puesto, William supervisó los preparativos del funeral del duque de Edimburgo, siendo este evento el último que realizó para la familia real. Quien será el sucesor de Peel es Andrew Parker.
La realeza británica dos semanas de luto para honrar la muerte del esposo de la reina Isabel II. Sin embargo, los miembros de la monarquía continuarán con su agenda de compromisos que se adecuen ante las circunstancias.
Por su parte, la princesa Ana, hijas de la monarca y el consorte fallecido, también retomó el trabajo y asistió a la Conferencia de Primavera del Real Colegio de Medicina de Urgencias en su papel de patrona de la organización por medio de una videoconferencia.
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