El pasado miércoles 4 de mayo, la actriz Amber Heard subió al estrado para declarar en el juicio que enfrenta con su exmarido, el actor Johnny Depp, por la demanda que este interpuso en su contra por difamación.
La protagonista de Aquaman relató el supuesto primer golpe que recibió por parte del famoso. Según sus declaraciones, ambos estaban en el mueble del actor, quien estaba “ebrio” y al no tolerar que la rubia se riera del tatuaje que se había hecho él, le propinó una bofetada.
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«Pensaba que estaba de broma [sobre la palabra reproducida en el tatuaje], así que me reí. Y me cruzó la cara de una bofetada. Y volví a reírme, porque no sabía qué otra cosa hacer. Pensé que todo debía de ser una broma. Me le quedé mirando, todavía medio riéndome, pensando que iba a empezar a reírse también. Y me dijo: ‘¿Te crees que es gracioso? ¿Te consideras una perra graciosa?’. Y volvió a pegarme y me caí al suelo», contó Amber.
Tras la presunta agresión, Heard habría decidió terminar por completo su relación con Johnny, pero no lo hizo porque supuestamente él le suplicó continuar juntos y le aseguró que nunca volvería a pegarle.
«Sabía que no estaba bien y que tenía que dejarlo. Ojalá pudiera sentarme aquí y decir que me marché inmediatamente de la casa, que me defendí. Pero quería creerle, quería creer que había cruzado una línea pero que no lo volvería a hacer», dijo la actriz.
El juicio entre los actores llegó a la tercera semana y aún Amber Heard mantiene su posición de víctima, mientras que Depp también asegura que su ex lo golpeó e hirió en varias ocasiones.
La demanda por difamación la interpuso Johnny en contra de la artista, luego de que esta escribiera un artículo en el Wahsington Post sobre cómo sobrevivir a la violencia doméstica.
