El diseñador francés Pierre Cardin, un estilista visionario del prêt-à-porter, falleció este 29 de diciembre a los 98 años.
El modisto, a quien se le acredita la invención del negocio de la moda como se conoce hoy, murió en el American Hospital de Neuilly-sur-Seine, en las afueras de París, dijo su familia, según la Agencia France-Presse. No se ha revelado la causa del deceso.
Más que un diseñador
«La moda no es suficiente», dijo una vez Cardin a Eugenia Sheppard, columnista y crítica de moda estadounidense. «No quiero ser sólo un diseñador», sentenció.
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Y lo consiguió. Vistió a los más famosos, pero también fue un revolucionario del diseño, un comerciante que llevó las grandes marcas a a las masas.
Cardin nació en Italia, en San Biaio di Callalta, en 1922, en una familia muy numerosa (10 hermanos). Llegó a Francia con 6 años, instalándose en una ciudad minera, Saint-Etienne. Su nombre esos días era Pietro Cardin.
El diseñador se hizo conocido en los años 50 por su estilo vanguardista, y en los 60 por sus diseños futuristas inspirados en la era espacial. Prefería las formas y los motivos geométricos e innovó al diseñar la primera moda unisex, más experimental que práctica.
Entre sus primeros grandes logros de esa época destaca el bubble dress (vestido burbuja), caracteriza por una falda voluminosa, cuyo borde se dobla sobre sí mismo para crear un efecto «bubble’.
En los años 70 puso de moda la alternancia de faldas mini (a mitad de muslo) y maxi (largas hasta los tobillos) y la combinación de minifalda con abrigo, blusa o chaquetas muy largas.
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