Hace poco las reinas Letizia y Sofía, fueron las protagonistas de una riña, cuando se encontraban en la Catedral de Palma, todo pasó porque la reina Letizia se interpuso ante la abuela de sus hijas para ser fotografiadas, la cual ella obstaculizó ese momento.
Pero al parecer, también hubo resurrección para los problemas que se los tenían bien escondidos. El origen de dicho pleito viene desde el mes de noviembre de 2003, según las fuentes.
Y es que luego del anuncio del compromiso entre Don Felipe y Letizia Ortiz, la Reina Sofía se convirtió en gran apoyo para la recién llegada al reino, testigos aseguran que hasta fue adoptada por doña Sofía, en esa época quizá si se «querían».
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Fue tanto el buen recibiendo de la nueva integrante de la familia, que en sus primera declaraciones agradeció el apoyo que recibió, en dicho discurso también hubo su momento «amarga» pues no todo fue agradecimiento.
Durante sus minutos al micrófono, Ortiz mandó a callar a Don Felipe, y que le permitiera terminar el pequeño discurso que daba por primera vez ante los medios en el Palacio de El Pardo.
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«A partir de ahora y de forma progresiva voy a integrarme en esta nueva vida con las responsabilidades que conlleva y con el apoyo y cariño de…» lo comentaba la reina antes de ser interrumpida por Don Felipe.
Esto fue el indicio con el cual la Reina Letizia marcó su «territorio» a través de los años, con la llegada de las infante Leonor y Sofía, la relación entre las reinas cambió, en la tardes Sofía realizaba algunas visitas a sus nietas, visitas que al parecer le demostraron que no era bien recibida, ya que según Ortiz «alteraba la rutina de las pequeñas».
Lo que llevó a la madre de Felipe VI quejarse en pequeños grupos sociales a los cuales se ve involucrada, de lo poco que veía a sus adoradas nietas.
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En el 2014 volvieron a ser noticia, y es que ese año, era el año de Doña Letizia, pues dejó claro que desde ese momento era ella quien poseía el mando, rumores aseguran que no quería ser humillada como doña Sofía por Don Juan Carlos.
Todo esto y más esconden la familia real, quienes para su vida externa y ante los medios saben disimular sus «pequeñas diferencias» pero esta vez se les pasó un poquito la mano y estamos seguros que esa «riña» no quedará solo en la historia.
