El príncipe Harry está dispuesta a pelear por su título nobiliario que posee al ser parte de la familia real británica, además de las condecoraciones militares que obtuvo por la década de servicio que le ofreció a la corona.
Y es que más allá de haber renunciado a principio del año pasado a la monarquía, el esposo de Meghan Markle no desiste de seguir como miembro distinguido de la casa Windsor.
Es por ello, que el duque de Sussex desea renegociar con su abuela sobre las peticiones que lo obligarían a despojarse de los reconocimientos que logró cuando formó parte de la realeza, como por ejemplo, resultar nombrado como capitán general del Cuerpo de Marines Reales al igual que comandante de honor en la Real Fuerza Aérea de Honington, entre otras distinciones.
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Además, también figuró como creador de los Invictus Games (unos deportes multidisciplinares en los que participan veteranos heridos o enfermos).
Ante las posibilidades de que le despojen dichas condecoraciones, Harry habría “arrinconado” a la monarca nonagenaria para evitar que le quiten sus títulos militares, según contó una fuente cercana del esposo de Meghan, quien dijo a The Telegraph: “Su trabajo como adalid del servicio militar es una de las funciones más importantes para él y por supuesto que quiere conservar esos títulos».
Por otro lado, la experta en realeza Daniela Elser desveló para Express, que Isabel II se ve en la obligación de arrebatarle dichos reconocimientos, pese a que supuestamente no quiere hacerlo. “Si la reina decide finalmente rescindir los preciados honores militares de su nieto, no será porque tenga que hacerlo, sino porque siente que sus acciones del último año así lo requieren».
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