En el patio trasero de una familia en Ankara, Turquía nació un gato con cuatro orejas y además tiene una mancha en forma de corazón en su barriga. Al gato lo llamaron Midas y ha acaparado la atención de medio mundo gracias a las tiernas fotos que circulan en las redes sociales.
La cuenta de Midas en Instagram ya cuenta con más de 139.000 seguidores gracias a su curiosa apariencia, resultado de una mutación genética que le ha otorgado a este gato un segundo par de orejas.
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Esta condición física no tiene efectos nocivos en su salud y audición, ya que todas las orejas, pequeñas y grandes, se conectan al canal auditivo.
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Canis Dosemeci fue quien se enamoró nada más ver a este gato y lo adoptaron en seguida. «Nunca pensamos en comprar un gato, solo queríamos rescatar a un gato de la calle y queríamos adoptarlo», dijo Dosemeci.
Midas tras ser adotada por Canis fue llevada al veterinario donde se diagnosticó que escucha perfectamente. Actualmente convive con sus dos amigos perros labradores: Suzy de 12 años y Zeyno de 14.
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