Una pareja canadiense decidió viajar por distintos lugares del mundo, al enterarse de que tres de sus cuatro hijos padecen una enfermedad genética que afecta su vista y que con el paso del tiempo perderán por completo la visión.
El matrimonio detrás de esta historia está conformado por Edith Lemay y Sebastien Pelletier, quienes con 12 años de matrimonio, notaron que su hija mayor, Mia, comenzó a tener problemas de visión a los tres años de edad.
El médico especialista diagnóstico que la pequeña padecía retinosis pigmentaria, una enfermedad genética, que con el paso del tiempo causa disminución e incluso puede causar perdida total de la vista.
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Sin embargo, tiempo después Lemay y Pelletier descubrieron que otros dos de sus hijos, Colin y Lauren, también padecían los mismos síntomas de su hermana mayor.
Ante el diagnóstico, la pareja aceptó la situación y se centró en seguir las recomendaciones del especialista, que consistió en general recuerdos visuales que sus hijos pudieran conservar en su memoria cuando llegara el momento de la perdida total de su vista.
Asimismo, la pareja ajustó sus finanzas para planear un viaje con una duración de un año para recorrer varios lugares del mundo, con la finalidad de que sus hijos generen recuerdos que le duren por el resto de su vida.
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