Durante la reciente visita de Estado del príncipe William y Kate Middleton a Irlanda, el heredero al trono rompió el protocolo, pero, lejos de ser criticado, el mundo recibió el gesto con admiración.

Todo sucedió cuando los duques de Cambridge caminaban por las calles del condado de Kildare frente a cientos de fanáticos. Entre la multitud se encontraba Jennifer Malone, una chica con síndrome de Down considerada una verdadera admiradora del príncipe, quien le regaló un ramo de narcisos y le pidió que por favor se los entregara a su esposa, Kate Middleton.

William no solo recibió las flores de Malone, también aceptó tomarse una selfie con ella, acto que está prohibido para los miembros de la realeza. Los royals no pueden posar en ninguna foto que no sea oficial, pero en este caso no le importó saltarse la regla.

Donna Malone, mamá de Jennifer, compartió la imagen de su hija junto al príncipe en sus redes sociales y en una entrevista que le hizo el diario The Mirror, la mujer dijo que William “era un tipo muy agradable”.

Leer también: Mira la foto inédita de Édgar Ramírez en «Resistencia»

Para Jennifer Malone no es la primera vez que posa con una personalidad, pues ya tiene varias fotos con estrellas de Hollywood, incluyendo una con el mismísimo Hugh Jackman.

Facebook Comments Box