La viuda de Vicente Fernández, Doña Cuquita, aseguró que defenderá la memoria de «El Charro de Huentitán» y sus derechos, esto debido al estreno de la bioserie de Televisa El último rey: El hijo del pueblo, este lunes.
A través de la cuenta en Instagram de Vicente Fernández, su viuda recordó la forma en que la empresa pretendió obtener los derechos para contar la vida del cantante, cuando aún estaba en vida.
Doña Cuquita aseguró que no existe censura para la serie de El Último Rey: El hijo del pueblo, aunque la negativa de la familia Fernández para que se emita la producción se debe a un tema de reconocimiento al nombre del cantante.
En el comunicado de prensa emitido en Instagram, la viuda de Don Chente, María Refugio detalló que ni ella ni sus hijos quieren recibir dinero de Televisa, ni un homenaje a Fernández, ya que considera que se trata de temas económicos y los acusó de presuntamente robarse su imagen. «Ni yo ni mis hijos queremos ni un centavo de Televisa, que les quede claro. Es un tema de dignidad. Que no me vengan con su cuento de que es un homenaje con todo respeto para Vicente. Es por dinero, robándose su imagen».
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«Recuerdo cuando Televisa quiso que Vicente les cediera sus derechos gratuitamente para hacer una serie de su vida y tiempo después le ofrecieron migajas sin tomar en cuenta su trayectoria. Vicente no se dejó. Me dijo: ‘Cuquita estos no tienen llenadera’», dice parte del documento publicado en el perfil de Instagram de Vicente Fernández.
Cuquita también expresó: «Me da tristeza que señores que decían amigos y compartieron el pan en nuestra mesa, hayan empezado desde octubre un plan para robarse los derechos de Vicente, cuando no se podía defender al estar grave en una cama de hospital ¡Quisiera ver lo hubieran tratado de hacer cuándo estaba vivo!».
Finalmente, la madre de Alejandro Fernández aseveró que su esposo dejó todo en orden para el día que perdiera la vida. «Vicente registró sus marcas, su nombre artístico y la ley protege su imagen. Hizo todo bien y de acuerdo a la ley mexicana. Nadie en México puede arrebatar esos derechos para lucrar. Eso no es libertad de expresión, es un robo».
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