En la exhibición de la 79.ª edición del Festival de Cine de Venecia. La película The Whale,del director Darren Aronofsky y protagonizada por el actor Brendan Fraser fue proyectada con la finalidad de que los asistentes al evento disfrutaran de la historia.
Y es que, la cinta trata de un profesor universitario que sufre de obesidad mórbiba, condición que impide realizar actividades físicas debido a problemas en los músculos.
Por tal motivo, al finalizar la proyección, la ovación por parte de las personas se prolongó durante unos seis minutos, momento en el que se le puede apreciar al artista tan emocionado que lloró.
Asimismo, recibió el abrazo del director de largometraje y se levantó entre lágrimas ante los aplausos de sus compañeros de reparto.
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“Gracias por esta maravillosa acogida, deseo que esta película cause la misma profunda impresión que provocó en mí”, expresó Brendan Fraser al parecer en el encuentro con la prensa posterior al estreno.
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«Tuve que aprender a moverme de una manera nueva para interpretar el papel», recuerda Fraser, que ha tenido que usar una prótesis de 130 kilos de peso para interpretar a Charlie, el «personaje más interesante» de su carrera. «Sentí vértigos al final de la jornada cuando me quitaban la prótesis por una sensación ondulante como cuando bajas de una góndola en Venecia», aseguró el estadounidense.
Cabe recordar que Fraser ha afrontado durante estos últimos años un doloroso proceso de divorcio y una depresión causada por el acoso sexual que sufrió, por parte del expresidente de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA) Philip Berk, según denunció públicamente. A sus 53 años, ha florecido con una interpretación de máxima exigencia que ya le hace postularse como uno de los preferidos a los Óscar.
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