Meghan y Harry - Cortesía: Hollywood Life

Creyeron que llevarían una vida muy íntima como cualquier corriente pero no, el príncipe Harry y su esposa Meghan están envueltos en polémica debido a que recientemente invadieron su privacidad en su casa en Los Estados Unidos.

Resulta que mientras en varias ocasiones, varios drones se han dedicado a merodear su mansión en Beverly Hill, Los Ángeles y sin querer hacer mucho escándalo, los duques de Sussex denunciaron los hechos en la policía, pero esto corrió como la pólvora.

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Fue así, como una fuente secreta declaró al diario The Daily Beast que los exmonarcas interpusieron la queja en las autoridades. «No saben quien los está piloteando, asumen que probablemente sean fotógrafos, pero no pueden estar seguros de esta suposición».

«Es realmente espeluznante que la gente pueda estar tomando fotos (…) sienten que están siendo invadidos, es especialmente aterrado cuando están afuera con Archie -su hijo-, es realmente aterrador», cita el vocero del que no revelan identidad.

¿Coincidencia o casualidad? En días de esta misma semana, la policía de la urbanización en la que vive la pareja, informó que drones habrían estado sobrevolando la zona; sin embargo, Meghan y Harry no abierto la boca para decir pío al respecto en su afán de «no ser foco de escándalo».

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