La cantante sueca Marie Fredriksson, integrante de Roxette, falleció este lunes 9 de diciembre tras luchar contra el cáncer durante 17 años, según confirmaron sus representantes.
La vocalista, que tenía 61 años, se dio a conocer en el mundo a finales de los años 80 junto a Per Gessle, con quien conformó el dúo sueco de pop rock Roxette.
Fue el tema The Look, de su álbum Look Sharp!, el que los lanzó a la fama global al adueñarse de las carteleras mundiales en 1989.
Otro de sus grandes éxitos globales fue It Must Have Been Love (Debe haber sido amor), que formó parte de la banda sonora de la taquillera película Pretty Woman (1990), protagonizada por la entonces desconocida Julia Roberts y Richard Gere.
Según reseña CNN, la artista fue diagnosticada con cáncer el 11 de septiembre de 2002, fecha en la que inició «el infierno», como ella misma lo definió en su autobiografía.
Todo fue paulatino, y tras olvidar las letras de sus canciones con frecuencia, un día se desmayó en su casa. «Cuando se despertó estaba en un hospital y le dieron la dura noticia: tenía cáncer cerebral», destaca la información de Infobae.
Como Roxette, Fredriksson y Gessle recorrieron los cinco continentes con su música, siendo ella destacada por su talento vocal y presencia escénica durante los conciertos en vivo.
Con 75 millones de copias vendidas, su éxito en el mercado hispanohablante, especialmente en Latinoamérica fue arrollador, lo que los llevó a lanzar en 1996 el álbum Baladas en español, que recogía sus temas románticos más importantes adaptados a la lengua de Cervantes. Un día sin ti (Spending My Time) fue la canción elegida como primer sencillo.
Uno de sus giras los trajo a Venezuela, donde ofrecieron un concierto el 17 de abril de 2012, en la Terraza del Ccct. Tras la presentación de los venezolanos de Aditus como teloneros, los escandinavos abrieron su espectáculo con la canción Dressed for Success.
La pareja incluso sufrió un robo en el país. «Lo más importante para nosotros es haberle cantado al público venezolano», dijo Fredriksson en aquel momento sobre el incidente.
Per Gessle, su compañero en Roxette y su amigo por más de 40 años, se despidió de ella con un emotivo mensaje: «El tiempo pasa tan rápido. No hace tanto tiempo que pasamos días y noches en mi pequeño departamento compartiendo sueños imposibles. ¡Y qué sueño llegamos a compartir! Me siento honrado de haber conocido tu talento y generosidad. Todo mi amor va para ti y tu familia. Las cosas jamas serán las mismas», escribió en su cuenta de Twitter.
