«A los 92 años y confortado con la paz espiritual de la bendición de Dios ha partido a la gloria celeste el maestro Carlos Almenar Otero. QEPD», confirmó a través de su cuenta en Twitter el padre José Palmar.
«Luego de una hospitalización en la ciudad de Miami, Florida, se despidió el cantante de mayor gloria y talento», expresó el sacerdote diocesano venezolano en el exilio.
El año pasado el cantante logró recuperarse de algunos problemas de salud tras ser trasladado a Estados Unidos en abril de 2017 presentando problemas de desnutrición y valores sanguíneos alterados. En aquel momento, la fundación que lleva su nombre organizó una serie de actividades para recaudar fondos y prestarle ayuda.
Nacido en Caracas, el 21 de marzo de 1926, el cantante y compositor venezolano Carlos Almenar Otero recibió notoriedad tras participar en el concurso de canto internacional El Gran Caruso que organizó el estudio Metro Goldwyn Mayer para promover la película del mismo nombre,, protagonizada por el tenor Mario Lanza en 1951.
Almenar participó y ganó el concurso por Venezuela, y en la final, que se efectuó en Río de Janeiro, obtuvo mención honorífica.
Su voz dejó registrados éxitos como Cara mia, Háblame de amores Mariú, Bye, bye romántica, No llores por mí, bella María y Una furtiva lágrima, entre muchos otros.
Además de eso, participó por muchos años como presidente del jurado en el programa de talentos musical de concurso ¿Cuánto vale el show?, que presentaba Guillermo González y se transmitía en Rctv (también tuvo etapas en VTV y Venevisión). Allí cada semana destacaba con sus comentarios y críticas sobre las interpretaciones de los aspirantes, que daban cátedra sobre técnica vocal y música en general.
También contó con programa El Bel Canto Ilustrado en Radio Nacional, donde realizó una gran labor de difusión de la música clásica y operática.
Grabó 54 discos en alemán, 19 en español, uno en japonés, uno en italiano y uno en inglés. Además ha sido compositor, de bellas canciones y de himnos.
Conocido como «La Voz de Oro de Venezuela», en 2016 fue nombrado Patrimonio Cultural Viviente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
