Este lunes a las 5 de la tarde comienza el bautizo del príncipe Louis, hijo de Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra, pero su bisabuela, la reina Isabel II no asistirá a la ceremonia y no precisamente por motivos de salud.
El bautizo del pequeño viene luego de un año muy movido para la familia real británica, que acaba de casar a su soltero de oro, el príncipe Harry, con la actriz Meghan Markle, pareja que no faltará esta tarde a la ceremonia eclesiástica, y que le regaló a Louis la primera edición de Winnie the Pooh (1926).
Los que si se ausentarán en la ceremonia será la reina Isabel II y su esposo, el príncipe Felipe y según “no se debe a motivos de salud”, sino que Isabel viajará al condado inglés de Norfolk para asistir este martes a unas celebraciones en el centro de Londres, con motivo del centenario de la Real Fuerza Aérea del Reino Unido.
En este evento será la primera vez que se vea al príncipe Louis desde su nacimiento, el pasado 23 de abril. Kensington aseguró que la ceremonia se llevará a cabo a partir de las cinco de la tarde y que durará aproximadamente 40 minutos.
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El arzobispo de Canterbury, Justin Welby es el encargado de dirigir el servicio que tendrá lugar en la Capilla Real del palacio de St. James, mismo sitio donde se efectuó el bautizo del príncipe George.
Louis será bautizado con agua del río Jordán y en la Lily Font, una pila de plata que fue encargada por la reina Victoria luego del nacimiento de su primogénita.
